Con el fin de año, la asociación de truficultores de Australia, ha publicado un resumen de la temporada. Este año han recolectado ya unos 1700kg de trufa, de los cuales unos 500kg se han vendido en el país y una buena parte ha ido a exportación, unos 1000kg, pero también comentan como una parte de la producción no ha tenido la salida esperada. Es por ello que están estudiando el tema de marketing y canales de valor en la comercialización con el objetivo de mejorar la colocación del producto, que para la temporada que viene, esperan sea de 3000kg (pensad que en su mayoría son plantaciones jóvenes y que por ello esperan un aumento exponencial de sus producciones). El precio medio a la que se ha vendido la trufa negra es de AU$1400/kg, poco mas de 1000€/kg.
No obstante se han encontrado con un problema no menor, que ya os comentaba en este Blog en septiembre, y es que más de un 50% de las trufas recolectadas están podridas o “tocadas”, con lo que pierden valor, y además no está claro el motivo. Es cierto que he observado que gran parte de los suelos donde realizan las plantaciones no presentan un buen drenaje y ello podría favorecer la pudrición de las trufas. De todos modos han solicitado al gobierno un proyecto de investigación para determinar por qué sucede.
Los nuevos países productores de trufas están generando consumo interno y por ello incrementan la demanda real de trufas, no obstante, no toda la trufa queda “colocada” fácilmente como pasa en España, al no existir los canales tradicionales de comercialización. En Nueva Zelanda, en mi opinión, esto no está pasando todavía, debido a que las producciones reales son muy bajas (yo creo no más de 200-300kg anuales), aunque lleven muchos más años plantando, las plantaciones no funcionan bien por varios motivos…
Feliz Año Nuevo,
Marcos Morcillo